Internet de las cosas, uno de los pilares de las ciudades inteligentes

Hoy en día el concepto de Internet de las Cosas (IoT) se utiliza en una gran variedad de industrias; sin embargo, en el entorno de una Smart City es donde su aplicación alcanza uno de sus grandes potenciales.

Los espacios urbanos modernos son auténticos hervideros de nuevas ideas e innovaciones que sacuden el mundo. La adopción urbana de la tecnología conectada está teniendo un gran impacto en ciudades de todo el mundo, especialmente en las zonas con una mayor densidad de población, las cuales se están beneficiando más de la mejora del entorno y la gestión de sus ciudadanos.

Internet of Things, como concepto

El nombre Internet de las Cosas (o Internet of Things, en inglés) corresponde a una idea muy visual de un objeto que es capaz de conectarse a Internet. Es decir, un objeto -un frigorífico, por ejemplo, que tradicionalmente no estará conectado a Internet- alcanza ahora esa capacidad. Hoy en día, un farol o cualquier tipo de objeto que no haya sido tradicionalmente un punto de acceso a Internet puede convertirse en uno para ciertos fines. Además, este elemento, ahora inteligente, es capaz de captar información de todo su entorno y comunicarse con otros objetos que le rodean, así como procesar y gestionar la información generada por sí mismo. De esta forma, los datos pueden convertirse en información útil.

Ciudad Conectada

Ahora extrapolemos los casos de uso potencial a toda una ciudad en la que tenemos muchos objetos capaces de capturar información e interactuar entre ellos. El farol puede ahora, no sólo comunicarse con los dispositivos más cercanos, sino también con otros objetos que están conectados a Internet y procesar esta información para tomar decisiones, por ejemplo, sobre la intensidad de la luz que es adecuada. Los objetos también pueden enviar y procesar información sobre lo que está sucediendo a su alrededor. En este caso concreto, si la información de la farola se procesa junto con la información de un semáforo cercano, podemos empezar a hablar de casos de uso de Internet of Things en el entorno de una ciudad inteligente. Cuando se trata de ciudades inteligentes y de la gestión del espacio público, el alcance de las posibilidades que ofrece el IoT es infinito. En otras palabras, Internet of Things ofrece considerables posibilidades y margen de maniobra en el ámbito de las ciudades inteligentes. Es uno de los aspectos que abordaremos en el Máster en Global Smart City Manager. La realidad es que el IoT es una tecnología que ya existe, que se ha desarrollado durante mucho tiempo, pero cuya implantación en el espacio público prevalecerá en los próximos años. Y dependiendo de la forma en que abordemos nuestro proyecto Smart City o la implementación de esta tecnología en el espacio público, los proyectos se desarrollarán de una forma u otra, pudiendo alcanzar objetivos comunes.

Posibles casos de uso de IoT en ciudades inteligentes

Como hemos comentado, el alcance de los casos de uso de IoT en ciudades inteligentes es amplio y tiene el potencial de racionalizar múltiples áreas. A continuación, encontrarás la lista de algunos de los casos de uso más comunes en todo el mundo. Aparcamiento inteligente Una solución de IoT permitirá controlar la disponibilidad de plazas de aparcamiento en la ciudad. Con los datos GPS de los smartphones de los conductores (o los sensores de la superficie de la carretera en el suelo), las soluciones de aparcamiento inteligentes permiten al usuario saber cuándo el aparcamiento más cercano queda libre para encontrarlo más rápidamente. Carreteras inteligentes y gestión inteligente del tráfico Diferentes soluciones de IoT permitirán controlar los niveles de los vehículos y de los peatones para optimizar los itinerarios de conducción y a pie. El uso de diferentes tipos de sensores, así como los datos GPS de los teléfonos inteligentes de los conductores ayudarán a determinar el número, la ubicación y la velocidad de los vehículos. Gracias a una plataforma de gestión de la nube que conecta varios semáforos, la ciudad podrá monitorizar los tiempos de los semáforos en verde y modificarlos automáticamente en función de la situación actual del tráfico para evitar la congestión. Un mejor control de la congestión del tráfico también contribuirá a mejorar la calidad del aire. Transporte público inteligente Con la ayuda de los sensores de IoT, podemos obtener datos para conocer los patrones de uso del transporte público por parte de los ciudadanos. Las soluciones inteligentes de transporte público pueden combinar múltiples fuentes, como la venta de billetes y la información sobre el tráfico. Los usuarios también pueden utilizar una aplicación para contactar con las autoridades en caso de que detecten incidentes o actividades sospechosas. Alumbrado público inteligente Las ciudades inteligentes basadas en IoT permiten un mejor mantenimiento y control de la iluminación en las calles. Equipar las farolas con sensores y conectarlas a una solución de gestión de la nube los hace más rentables. Con este sistema, la ciudad puede adaptar el horario de iluminación a la zona correspondiente y teniendo en cuenta las condiciones meteorológicas. Gestión inteligente de los residuos La recogida de residuos es otro servicio que podría optimizarse con una solución habilitada para la IoT mediante el seguimiento de los niveles de residuos, así como mediante la optimización de rutas y análisis operativos. Las ciudades inteligentes se presentan en todas las formas y tamaños, pero también lo hacen las soluciones de IoT que se podrían infundir en las operaciones de una ciudad. Y aunque no son exactamente una ciudad inteligente, constituyen un componente importante para un futuro más inteligente y sostenible. Sergio Lozano Pérez, docente del Máster Internacional Smart City Manager, nos explica qué significa Internet of Things y para qué se utiliza. https://www.youtube.com/watch?v=jiWf1pcJX_M&feature=youtu.be